Andrew Payton
UNA HISTORIA A MENUDO LE DIGO Digo esta historia a menudo en inglés, y voy a intentar en español. Hace muchos años, cuando era en la escuela y tenía dieciséis o diecisiete años, un muchacho apuntó con una arma a mí en una calle de Baltimore. Yo estababa caminando a un concierto con dos amigos, un chico y una chica. Había nieve en las acercas, y por eso caminamos en una línea conmigo en el parte posterior. Este muchaco, quizás quince años de edad, cruzó la calle, levantó su arma, y me dijo: Dame tu chica! Pocas personas piensan acerca de como van a reacionar bajo presión así, y mi respuesta siempre me ha sorprendido. Tal vez si me pidió dinero, habría dado a él, pero no pude cumplir con esta solicitud. Me volví hacía él, y le dije: ¿Cómo estás? ¿Estás teniendo una buena noche? Me miró con una expresión muy confundido y otra vez me dije: Dame tu chica! Mis amigos siguieron caminando y les seguí, de nuevo diciendo a él: ¿Cómo estás? ¿Cómo te sientes? Él muchacho añadió nada, pero nos seguió con su arma a mi cabeza. Después de un rato, nos dejó y caminó al otro lado. Fue entonces cuando me entró el pánico. El arma era auténtica, y en verdad se dirige a la cabeza. Regresamos a casa un poco de miedo. No sé lo que he aprendido de lo sucedido, pero las reacciones de cada persona son diferentes. Espero estar tan tranquilo si algo como esto vuelva a suceder.
Apr 27, 2015 3:43 PM
Corrections · 7
1

UNA HISTORIA que cuento A MENUDO LE DIGO

Digo Cuento esta historia a menudo en inglés, y lo voy a intentar en español.

Hace muchos años, cuando era estaba en la escuela y tenía dieciséis o diecisiete años, un muchacho me apuntó con una arma a mí en una calle de Baltimore. Yo estababa iba caminando a un concierto con dos amigos, un chico y una chica. Había nieve en las acercas, y por eso caminábamos en una línea conmigo en el la parte posterior. Este muchacho, quizás quince años de edad, cruzó la calle, levantó su arma, y me dijo: Dame tu chica!

Pocas personas piensan acerca de como van a reaccionar bajo una presión así, y mi respuesta siempre me ha sorprendido. Tal vez si me pidió hubiera pedido dinero, se lo habría dado a él, pero no podía cumplir con esta solicitud. Me volví hacía él, y le dije: ¿Cómo estás? ¿Estás teniendo una buena noche?

Me miró con una expresión muy confundida y otra vez me dijo: Dame tu chica!

Mis amigos siguieron caminando y les seguí, de nuevo diciendole a él: ¿Cómo estás? ¿Cómo te sientes?

El muchacho no añadió nada, pero nos siguió con su arma en mi cabeza. Después de un rato, nos dejó y caminó al hacia otro lado.

Fue entonces cuando me entró el pánico. El arma era auténtica, y en verdad se dirige la dirigió a mi cabeza. Regresamos a casa con un poco de miedo. No sé lo que he aprendido de lo sucedido, pero las reacciones de cada persona son diferentes. Espero estar tan más tranquilo si algo como esto me vuelve a suceder.

April 27, 2015

UNA HISTORIA A MENUDO LE DIGO

Digo esta historia a menudo en inglés, y lo voy a intentar en español.

Hace muchos años, cuando estaba en la escuela y tenía dieciséis o diecisiete años, un muchacho apuntó con una arma a mí en una calle de Baltimore. Yo estababa caminando a un concierto con dos amigos, un chico y una chica. Había nieve en las acercas, y por eso caminamos en una línea conmigo en el parte posterior. Este muchaco, quizás de quince años de edad, cruzó la calle, levantó su arma, y me dijo: Dame tu chica!

Pocas personas piensan acerca de como van a reacionar bajo presión así, y mi respuesta siempre me ha sorprendido. Tal vez si me hubiese pedido dinero, se lo habria, pero no pude cumplir con esta solicitud. Me volví hacía él, y le dije: ¿Cómo estás? ¿Estás teniendo una buena noche?

Me miró con una expresión muy confundido y otra vez me dijo: Dame tu chica!

Mis amigos siguieron caminando y les seguí, de nuevo diciendo a él: ¿Cómo estás? ¿Cómo te sientes?

Él muchacho añadió nada, pero nos seguió con su arma a mi cabeza. Después de un rato, nos dejó y caminó al otro lado.

Fue entonces cuando me entró el pánico. El arma era auténtica, y en verdad se dirigia a la cabeza. Regresamos a casa con un poco de miedo. No sé lo que he aprendido de lo sucedido, pero las reacciones de cada persona son diferentes. Espero estar tan tranquilo si algo como esto vuelva a suceder.

April 27, 2015

UNA HISTORIA QUE A MENUDO LA DIGO/CUENTO.

Cuento esta historia a menudo en inglés, y voy a intentarlo en español.

Hace muchos años, cuando iba en la escuela y tenía dieciséis o diecisiete años, un muchacho me apuntó con una arma en una calle de Baltimore. Yo estababa caminando rumbo a un concierto con dos amigos, un chico y una chica. Había nieve en las acercas(or: banquetas), y por eso caminabamos en una línea conmigo en la parte posterior. Este muchacho, quizás de quince años de edad, cruzó la calle, levantó su arma, y me dijo: ¡Dame a tú chica!

Pocas personas piensan acerca de como van a reacionar bajo esa presión y mi respuesta siempre me ha sorprendido. Tal vez si me hubiera pedido dinero, se lo habría dado, pero no pude cumplir con esta solicitud. Me volví hacía él, y le dije: ¿Cómo estás? ¿Estás teniendo una buena noche?

Me miró con una expresión muy confundida y otra vez me dijo: ¡Dame a tú chica!

Mis amigos siguieron caminando y les seguí, de nuevo diciendole (a él): ¿Cómo estás? ¿Cómo te sientes?

El muchacho no añadió(better:dijo) nada, pero nos seguió con su arma (apuntando a/) en mi cabeza. Después de un rato, nos dejó y caminó al otro lado.

Fue entonces cuando me entró el pánico. El arma era auténtica, y en verdad se dirige me apuntó a la cabeza. Regresamos a casa con un poco de miedo. No sé lo que he aprendí de lo sucedido, pero las reacciones de cada persona son diferentes. Espero estar tan tranquilo si algo como esto vuelve a suceder.

 

Great story! you have some nerves, and good job, few corrections. :)

April 27, 2015

UNA HISTORIA QUE A MENUDO LE DIGO CUENTO

Digo Cuento esta historia a menudo en inglés, y voy a intentar contarla en español.

Hace muchos años, cuando era estaba en la escuela y tenía dieciséis o diecisiete años, un muchacho me apuntó con una arma a mí en una calle de Baltimore. Yo estababa iba caminando a un concierto con dos amigos, un chico y una chica. Había nieve en las acercas aceras, y por eso caminamos en una línea conmigo en el parte posterior. Este muchaco, quizás de quince años de edad, cruzó la calle, levantó su arma, y me dijo: ¡Dame tu chica!

Pocas personas piensan acerca de como van a reacionar bajo una presión así, y mi respuesta siempre me ha sorprendido. Tal vez si me pidió hubiera pedido dinero, se lo habría dado a él, pero no pude cumplir con esta esasolicitud. Me volví hacía él, y le dije: ¿Cómo estás? ¿Estás teniendo una buena noche?

Me miró con una expresión muy confundido y otra vez me dijo: ¡Dame tu chica!

Mis amigos siguieron caminando y les seguí, de nuevo diciendo a él le dije: ¿Cómo estás? ¿Cómo te sientes?

El muchacho no añadió nada, pero nos siguió con su arma apuntando a mi cabeza. Después de un rato, nos dejó y caminó al otro lado.

Fue entonces cuando me entró el pánico. El arma era auténtica, y en verdad se dirige dirigía a la cabeza. Regresamos a casa con un poco de miedo. No sé lo que he aprendido aprendí de lo sucedido, pero las reacciones de cada persona son diferentes. Espero estar tan tranquilo si algo como esto vuelve a suceder.

 

Mis sugerencias van en azul/gris

Los errores en rojo/tachado


Creo que la histora está muy bien contada en español.

April 27, 2015
Want to progress faster?
Join this learning community and try out free exercises!