Pasar la noche en blanco

Anoche mi mujer y yo estábamos muy cansados y por eso nos acostamos a las nueve. No solemos acostarnos tan temprano pero mientras veíamos la tele se me cerraban los ojos y mi mujer no era capaz de mantener los suyos abiertos tampoco. Poco después de meternos en la cama nos quedamos dormidos, sin embargo a las once menos cinco me desperté. Pensé que había dormido muchas horas pero al mirar al reloj me di cuenta de que no. Ya que quedaban muchas horas para el amanecer quería volver a dormir pero no pude. Di vueltas hasta que no aguanté más y a las tres y cuarto, tres horas antes de la hora en la que me suelo levantar, me levanté. Me he tomado mucho café e imagino que tendré que seguir tomandolo para mantenerme despierto. Pase lo que pase estoy determinado a quedarme alerta hasta que sean las once o las doce de la noche, nunca más voy a volver a cometer el error de meterme en la cama tan temprano. Quizás si me hubiera acostado más tarde, por ejemplo a las dos de la madrugada, habría dormido mejor de lo que dormí anoche y ahora me sentiría más despierto y alerta.
¡Que no se acabe el café!

Pasar la noche en blanco

Anoche mi mujer y yo estábamos muy cansados y por eso nos acostamos a las nueve. No solemos acostarnos tan temprano pero, mientras veíamos la tele, se me cerraban los ojos y mi mujer no era capaz de mantener los suyos abiertos tampoco. Poco después de meternos en la cama nos quedamos dormidos, sin embargo, a las once menos cinco me desperté. Pensé que había dormido muchas horas pero al mirar al reloj me di cuenta de que no. Ya que quedaban muchas horas para el amanecer quería volver a dormir pero no pude. Di vueltas hasta que no aguanté más y a las tres y cuarto, tres horas antes de la hora que me suelo levantar, me levanté. Me he tomado mucho café y e imagino que tendré que seguir tomándolo para mantenerme despierto. Pase lo que pase, estoy determinado a quedarme alerta hasta que sean las once o las doce de la noche, nunca más voy a volver a cometer el error de meterme en la cama tan temprano. Quizás si me hubiera acostado más tarde, por ejemplo a las dos de la madrugada, habría dormido mejor de lo que dormí anoche y ahora me sentiría más despierto y alerta.
¡Que no se acabe el café!