Hola a todos, me llamo Carolina, soy de China, todo el mundo sabe que la comida china es muy rica, aprovechando esta oportunidad comercial. Hace dos años abrí un restaurante en el centro de Madrid, la capital de España. Al principio, no conocía a nadie en esta tierra, me sentía muy sola. Afortunadamente, un día en mi restaurante me encontré con Ana, quien era muy cariñosa y habladora. Es que ella tenía mucho interés en los platos chinos, sobre todo, lo de pato asado. Cuando comió en mi restaurante siempre charlaba conmigo sobre su vida o su trabajo. Una vez ella me dijo que le gustaba un grupo de música colombino llamado MORTA. A mí también me gustaba este grupo! Por lo tanto, cuando tuvimos tiempo libre, fuimos al concierto del grupo juntas. Con el paso del tiempo, nos convertimos en buenas amigas. Hasta ahora, Nos vemos muy seguido, y nos sentimos muy contentas.

Hola a todos, me llamo Carolina, soy de China, todo el mundo sabe que la comida china es muy rica, aprovechando esta oportunidad comercial; hace dos años abrí un restaurante en el centro de Madrid, la capital de España. Al principio, no conocía a nadie en esta tierra, me sentí muy sola. Afortunadamente, un día en mi restaurante me encontré con Ana, quien era muy cariñosa y conversadora (habladora es una persona que inventa o exagera las cosas). Es que ella tenía mucho interés en los platos chinos, sobre todo, los de pato asado. Cuando comió en mi restaurante siempre charlaba conmigo sobre su vida o su trabajo. Una vez ella me dijo que le gustaba un grupo de música colombino llamado MORTA. ¡A mí también me gustaba este grupo! Por lo tanto, cuando tenemos tiempo libre, fuimos al concierto del grupo juntas. Con el paso del tiempo, nos convertimos en buenas amigas. Hasta ahora, nos hemos visto muchas veces, y cada vez que lo hacemos nos sentimos muy contentas.

Hola a todos, me llamo Carolina, soy de China, todo el mundo sabe que la comida china es muy rica, aprovechando esta oportunidad comercial. Hace dos años abrí un restaurante en el centro de Madrid, la capital de España. Al principio, no conocía a nadie en esta tierra, me sentí muy sola. Afortunadamente, un día en mi restaurante me encontré con Ana, quien era muy cariñosa y conversadora. Es que ella tenía mucho interés en los platos chinos, sobre todo, el de pato asado. Cuando comía en mi restaurante siempre charlaba conmigo sobre su vida o su trabajo. Una vez ella me dijo que le gustaba un grupo de música colombiano llamado MORTA. ¡A mí también me gustaba este grupo! Por lo tanto, cuando tuvimos tiempo libre, fuimos al concierto del grupo juntas. Con el paso del tiempo, nos convertimos en buenas amigas. Hasta ahora, nos hemos visto muchas veces, y cada vez nos sentimos muy contentas.