Ponte en su lugar Ayer empecé mi clase de español. Pensaba que empezamos el miércoles pero solo fue una explicación del curso y para presentarnos al profesor. Al principio éramos 3 alumnos pero ayer vino otra chica y ahora estamos trabajando en dos grupos - los principiantes y los más avanzados. Estoy en el grupo más avanzado. La primera cosa que hicimos era copiar un texto en nuestro cuaderno. Sí, has leído bien - copiar el texto. Me sentí como un niño pequeño pero nos dijo que era para asegurarse que supimos poner las tildes. El texto era bastante sencillo, sin palabras nuevas. Mientras tanto el profesor enseñó el abecedario al otro grupo. Luego el profesor hizo un dictado. Eso fue más divertido porque fue un reto. Me gustó esa parte de la clase. Después buscamos los susantivos en el dictado y escribimos una frase nueva con cada susantivo. Por último, buscamos los adjetivos. Mi compañero y yo pusimos 'poco' pero nuestro profesor dijo que no era un adjetivo. Desafortunadamente, justo cuando mi compañero iba a preguntar '¿por qué no?' el profesor interrumpió para decir que la clase había terminado. Y así fue la primera clase. Había muchos momentos cuando nos tocó sentar y esperar mientras el profesor terminó con el otro grupo o cuando el otro grupo estvo esperando para que nosotros terminamos. Y no sentí que había aprendido nada nuevo. La verdad es que esperaba más, pero él fue sincero con nosotros desde el principio y nos dijo el primer día cuando conocimos que no era profesor de español sino profesor de matemáticas. Supongo que había recortes o algo y por eso este año él ha tocado enseñarnos español. Parece un poco amargado con su nuevo horario y puedo entenderlo, si estás acostumbrado a trabajar por la mañana y ahora tienes horario por la tarde y si tu pasión es dar mates y te mandan a una clase de español para extranjeros, pues, yo tampoco estaría muy feliz ... supongo ... y tampoco sabría muy bien como manejar la nueva asignatura. Vamos a darle tiempo para coger su ritmo, a ver si las cosas mejoran. Al fin y al cabo es una lástima que él no puede dar matematicas como le gustaría.