Suzanne Butler
Había una niña que le gustaba tocar el piano. Todos los días ella practicaba hasta sus dedos se duelen. Algún día ella tuvo la oportunidad participar en un programa música para su escuela. Antes de empezar se ponía nerviosa. Tenía miedo de que cometería errors. Sus manos sudaban y entonces era su turno. Respiré muy profunda y empezó. Mantenía la calma y actuó magnífico
28. Dez. 2020 17:38
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Había una niña a la que le gustaba tocar el piano. Todos los días ella practicaba hasta que los dedos le dolieran. Un día ella tuvo la oportunidad de participar en un programa musical para su escuela. Antes de empezar se puso nerviosa. Tuvo miedo de cometer errores. Sus manos sudaban y entonces llegó su turno. Respiró muy profundo y empezó. Mantuvo la calma y actuó magníficamente.
28. Dezember 2020
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Había una niña que le gustaba tocar el piano. Todos los días ella practicaba hasta sus dedos se duelen. Algún día ella tuvo la oportunidad participar en un programa música para su escuela. Antes de empezar se ponía nerviosa. Tenía miedo de que cometería errors. Sus manos sudaban y entonces era su turno. Respiré muy profunda y empezó. Mantenía la calma y actuó magnífico
Había una niña que le gustaba tocar el piano. Ella practicaba todos los días Hasta que le dolieran sus dedos. Un día ella tuvo la oportunidad de participar en un programa de música de la escuela. Antes de empezar se puso nerviosa. Tenía miedo de cometer algún error. Sus manos sudaban y entonces le tocó su turno. Respiro muy profundamente y empezó. Mantuvo la calma y actuó magnífico
28. Dezember 2020
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Había una niña que le gustaba tocar el piano. Todos los días ella practicaba hasta que sus dedos le dolían. Un día ella tuvo la oportunidad participar en un programa músical para su escuela. Antes de empezar se puso nerviosa. Tenía miedo de que cometer errores. Sus manos sudaban y entonces llegó su turno. Respiro muy profundo y empezó. Mantuvo la calma y actuó magnífico
28. Dezember 2020
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Había una niña que le gustaba tocar el piano. Todos los días ella practicaba hasta que sus dedos le empezaban a doler. Un día tuvo oportunidad participar en un programa música de su escuela. Antes de empezar se ponía nerviosa. Tenía miedo de cometer errores. Sus manos sudaban y entonces era su turno. Respiró muy profunda y empezó. Mantenía la calma y actuó magnífico. (también puedes decir "tocó el piano de forma magnífica".)
28. Dezember 2020
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