Ejemplo:
Creo que es muy difícil.
No creo que sea muy difícil.
En estos dos ejemplos, ves que el segundo utiliza el subjuntivo del verbo "creer". Conjugamos el verbo al subjuntivo porque cambiamos el sentido de la frase. Es decir que no estás de acuerdo con algo, alguien o lo qué sea.
Otro ejemplo:
Creo que tienes que estudiar español.
No creo que tengas que estudiar español.
Pásalo bien!