Sí, es verdad. Por desgracia, no podemos evitar o escondernos de la publicidad.
Vivimos en la era del consumo y el consumo promueve la economía del mundo. Pero no creo que termine bien. Consumimos más que lo que necesitamos. La desigualdad entre los ricos y los pobres aumentan sin parar. Cuanto más consumimos, peor lo hacemos para el medio ambiente. No tengo tele en casa. Pero los anuncios han penetrado en mi vida por Internet y las redes sociales. Antes podía escapar de ellos, ahora no. Ya que vivo en una ciudad grande es casi imposible evitar los carteles de publicidad puestos en cada esquina. Incluso sin darnos cuenta absorbemos un montón de información tóxica.