En este artículo te voy a ofrecer 10 consejos a tener en cuenta al momento de comenzar tus prácticas de conversación con un tutor de idioma. italki nos ofrece diferentes modos de practicar nuestro idioma:

 

 

Estos últimos no son expertos en la enseñanza, pero si aprovechas al máximo su potencial, podrás establecer clases regulares que te ayudarán a fortalecer tus habilidades en el idioma mucho más rápido de lo que crees.

 

1. Comienza con una buena presentación

 

Siempre es bueno tener una presentación con tu tutor acerca de tus objetivos e intereses personales con respecto al idioma. Es necesario comunicar claramente cuál es el nivel que posees en el idioma que estás aprendiendo. Eso es de suma importancia para que el tutor guíe las sesiones en relación a tu conocimiento.

 

Un buen tutor debe tener en cuenta la edad y también debe conocer tus gustos personales y tus hobbies, ya que probablemente serán en el futuro el contenido principal de sus conversaciones.

 

Esto es primordial ya que una buena charla para que sea entretenida y sustentable en el tiempo, debe contener temas que sean de interés para el alumno.

 

2. Expresa claramente tus objetivos

 

Una persona que está aprendiendo un idioma para rendir un examen universitario puede necesitar un nivel de comprensión gramatical mucho más alto que una persona que requiere de las prácticas de conversación para viajar al extranjero.

 

Dar a conocer claramente el objetivo de tu aprendizaje es crucial para que el tutor pueda cumplir con tus expectativas.

 

3. Hablar de la vida privada de ambas personas no siempre es divertido

 

En general, las historias pueden ser divertidas si ambas personas, estudiante y tutor, congenian. Pero siempre hay una desventaja.

 

Hablar de nosotros mismos no requiere de mucho esfuerzo y en general se utiliza un vocabulario coloquial que no es muy sofisticado. En algún punto es bueno para conocerse pero no ayudará en el futuro a perfeccionar tus habilidades en el idioma.

 

4. No esperes a que el tutor te ofrezca todo

 

Si sientes que las sesiones no satisfacen tu desarrollo personal en el idioma, o que tu tutor no te ofrece las herramientas necesarias, entonces es el momento de replantear los objetivos y proponerle al tutor las herramientas que tú crees que serán útiles para seguir aprendiendo.

 

Debes recordar que los tutores no son personas especializadas en la enseñanza de idiomas y quizás tus propuestas pueden ayudar a que las charlas sean más productivas para ambos.

 

5. Haz preguntas sobre cada cosa que no comprendas

 

La práctica de la conversación incluye también la comprensión auditiva, eso significa que el estudiante también puede preguntar sobre lo que no comprende para agudizar el oído y la correcta pronunciación de las palabras.

 

Cada duda que no resuelvas puede generarte dudas posteriores. Si aún con las respuestas no logras comprender ciertos conceptos, no te frustres, es mejor anotar esas preguntas ya que luego, con más práctica, se irán resolviendo esos conflictos antes planteados.

 

6. Muestra interés eligiendo temas de conversación antes de comenzar la charla

 

Elegir un tópico de conversación antes de la sesión es una excelente idea para poder aprovechar al máximo el tiempo. Lo mejor es proponerle al tutor con anticipación los temas de los que quieres hablar, así el interés aumentará.

 

En ese caso pondrás a prueba también las habilidades de tu tutor ya que deberá investigar sobre eso para poder ayudarte en el lenguaje específico.

 

7. Prepara los temas de conversación

 

Hablar sobre un tema específico requiere de preguntas, opiniones y conclusiones. También ayuda a pensar en un vocabulario específico y en las palabras que más se adaptan a esa temática.

 

 

El uso y la práctica con nuevas palabras o con palabras poco utilizadas, permite ampliar el vocabulario del estudiante y le exige pensar en ello. El lenguaje, de ese modo se vuelve más específico y a veces más técnico.

 

El vocabulario comienza a ampliarse de a poco, generando dudas que serán de ayuda para la comprensión de expresiones poco comunes.

 

8. Permite equivocarte

 

Nunca tengas miedo de hablar de forma incorrecta, ya que esa es la manera de aprender mediante prácticas de conversación.

 

Es bueno que tu tutor se sienta con la libertad de poder corregirte cuando cometes errores, sean estos importantes o no para la compresión de tus expresiones.

 

También puedes preguntarle a tu tutor cuales son los errores más comunes que cometes para ir mejorando poco a poco. De ese modo podrás establecer tu nivel de autosuperación.

 

9. Cuenta historias que tu tutor no conoce

 

Es una buena estrategia y un desafío personal contar historias no conocidas por tu tutor para saber si él puede comprender a la perfección lo que estás hablando. Él podrá también ayudarte a mejorar tus expresiones dándote ejemplos más sencillos para decir lo mismo. Así harás que tu tutor también esté interesado en saber más sobre ti.

 

10. Pide las correcciones específicas sobre lo que quieres mejorar

 

Si quieres mejorar sobre un aspecto particular del idioma (tiempos verbales, pronombres, preposiciones, etc), pide a tu tutor que corrija específicamente esos aspectos durante la charla.

 

Cuando se está aprendiendo un idioma es común cometer muchos errores y no siempre es posible corregirlos todos. Por eso es necesario guiar a tu tutor en los aspectos que quieres mejorar para que pueda identificar los errores que más te interesan corregir.

 

Por último, un buen tutor debe conocer estas técnicas para mantener el interés y la continuidad del alumno. Si estás ante un tutor así, sigue adelante. Si no lo has logrado, pon a prueba a tu tutor con alguno de estos consejos y verás que la práctica será mucho más entretenida en el futuro.

 

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