Mi gato vive en casa de mis padres, a donde vuelvo una vez a la semana. A veces siento que él no me conoce, que me ve como a una extraña (aunque pago por todo lo que necesita). Afortunadamente, es un gato al que le gustan los seres humanos. No me muerde a no ser que lo enoje/enfade. Casi nunca está solo, le encanta dormir conmigo o con cualquier miembro de la familia. Es siempre cariñoso y dócil.