Cuando era una nueva madre divorciada con poco dinero, compré mi primera casa de alquiler, un dúplex. Vivía en una parte con mi hijo, y obtenía un ingreso del alquiler de la otra parte. Las casas de alquiler están protegidas de la inflación porque los precios del alquiler aumentan a un ritmo que refleja la inflación. En la mayoría de las circunstancias, los precios del alquiler aumentan más rápido que la inflación. Además, mi hipoteca no cambia, pero los precios de alquiler aumentan. En cinco años, cuando pague (usar dos veces seguidas el mismo verbo suena muy mal, usaría "realice" o "haga") el último pago hipotecario, mis ingresos serán de casi tres mil dólares, sólo de mi primera casa de alquiler.