Una receta que inventé y que me encanta es la siguiente: Bato un poco de avena con una banana y con leche (o mitad leche mitad agua) en una batidora. Las cantidades no tienen que ser exactas. Cocino la mezcla en un sartén o en un microondas. Se cocina muy rápidamente. Suelo echarle un poquito de nuez moscada, y ya. Queda riquísimo. Parece ser un postre de mil calorías, pero no es más que avena, leche, y banana.