Según mi experiencia, el desafío más fundamental de aprender un idioma es la falta de sentimiento de logro. Es decir, aunque nos pasamos mucho tiempo estudiandolo, no sentimos que hemos avanzado mucho en el largo camino del aprendizaje. En cambio, por ejemplo en los videojuegos, el resultado de derrotar a alguien o lograr algo, nos alegra y nos hace seguir jugando, es inmediato, por mucho que nos esforcemos y cansemos intelectualmente en el proceso. Incluso en las matemáticas, nos alegramos cada vez que solucionamos un ejercicio. Cuanto más difícil sea el ejercicio, más contentos estamos y eso nos fomenta a aprender más. En cuanto al idioma extranjero, no entiendo este programa de tele hoy, tampoco el mes que viene, ni el año que viene. Eso me haría perder la motivación. Lo que podemos hacer es reconocer este desafío y no esperar el sentimiento de logro inmediato; seguir una rutina y confiar en ella, especialmente cuando nos falta el ambiente del idioma o un curso en una escuela. Algún día, te sorprenderás de cuánto puedes entender del mismo programa de tele.